jueves, enero 25, 2007
Americanos
Hoy una entrada más relacionada con el nombre que con el adjetivo de este blog.
Muchas veces apreciamos patrones a partir de la observación no intencionada de los hechos. Esto es lo que me ha pasado a mi con los americanos (estadounidenses) y su temeridad (una palabra cuyo adjetivo, temeraria, me gusta mucho y me recordó el otro día una gran amiga - este de los temerarios es un tema apasionante que tenemos que tratar; estamos rodeados de ellos y, desgraciadamente, a su merced). Una forma mucho más rápida que la mía de llegar a esta conclusión es observar los avisos de seguridad que aparecen en muchos productos manufacturados o pensados para el mercado americano. No dispongo en este momento de ningún ejemplo real, pero uno que me viene a la mente en plan ilustrativo sería encontrar en unas tijeras el aviso "no introducir los dedos entre las dos cuchillas y cerrarlas" o algo así. Pues bueno, hoy he encontrado una noticia muy graciosa. Trata de unos investigadores que decidieron probar la capacidad de esterilización de un microondas con las esponjas, estropajos y otros utensilios que utilizamos para fregar, lavar, etc. Para ello las empaparon en aguas "residuales" y comprobaron que, utilizándolo a máxima potencia, en 2 minutos morían el 99% de las bacterias, en 4 todas, y en 10 hasta las esporas que eran las que más aguantaban. Pues nada, ni cortos ni perezosos, unos cuantos ávidos lectores de noticias científicas a la par que dispuestos emprendedores decidieron empezar a esterilizar sus utensilios también. Recojo algunas declaraciones de estos sufridos pioneros de la investigación casera:
Muchas veces apreciamos patrones a partir de la observación no intencionada de los hechos. Esto es lo que me ha pasado a mi con los americanos (estadounidenses) y su temeridad (una palabra cuyo adjetivo, temeraria, me gusta mucho y me recordó el otro día una gran amiga - este de los temerarios es un tema apasionante que tenemos que tratar; estamos rodeados de ellos y, desgraciadamente, a su merced). Una forma mucho más rápida que la mía de llegar a esta conclusión es observar los avisos de seguridad que aparecen en muchos productos manufacturados o pensados para el mercado americano. No dispongo en este momento de ningún ejemplo real, pero uno que me viene a la mente en plan ilustrativo sería encontrar en unas tijeras el aviso "no introducir los dedos entre las dos cuchillas y cerrarlas" o algo así. Pues bueno, hoy he encontrado una noticia muy graciosa. Trata de unos investigadores que decidieron probar la capacidad de esterilización de un microondas con las esponjas, estropajos y otros utensilios que utilizamos para fregar, lavar, etc. Para ello las empaparon en aguas "residuales" y comprobaron que, utilizándolo a máxima potencia, en 2 minutos morían el 99% de las bacterias, en 4 todas, y en 10 hasta las esporas que eran las que más aguantaban. Pues nada, ni cortos ni perezosos, unos cuantos ávidos lectores de noticias científicas a la par que dispuestos emprendedores decidieron empezar a esterilizar sus utensilios también. Recojo algunas declaraciones de estos sufridos pioneros de la investigación casera:
Impresionante documento, ¿no es así amigos lectores? La Universidad en cuestión reaccionó rápidamente adjuntando un aviso a navegantes: Para protegerse contra el riesgo de incendio, las personas que deseen esterilizar sus esponjas deben asegurarse de que previamente estén bien mojadas. Dos minutos es tiempo suficiente para la esterilización. Las esponjas no han de tener contenidos metálicos. Y para mi gusto, viene lo mejor, me descojono sólo de pensar en algún susodicho llevando a cabo la última parte del experimento: Tengan cuidado al sacar la esponja del microondas porque estará caliente. Jajajajajaja
- Sólo quería hacerles saber que su artículo sobre meter esponjas y estropajos en un microondas captó mi interés. Sin embargo cuando puse la mía en el microondas, se prendió fuego, me ahumó la casa, estropeó mi microondas, y me fastidió.
- Primero, la esponja queda inservible después de la esterilización, con lo que la tienes que tirar en vez de utilizarla. Y segundo, tu casa apesta como a goma de neumático quemada durante horas, incluso dejando abiertas puertas y ventanas.
Comentarios:
<< P´a;agina principal
Ante todo, no quiero aparaecer como el eterno defensor de los yankis, que la verdad creo que tienen sus defectos y sus virtudes, como cualquiera. Lo que me molesta es esa fijación antiamericana heredada de la guerra fría, por parte de gente con una ideología que se resisten a aceptar como fracasada. I´m sorry, lefties, game over.
Además, no me gusta tomar como tontos a los americanos, más que nada porque si ellos son la primera potencia económica y en avances tecnológicos, y digo que son tontos, a los que andamos bastante detrás, nos deja en una situación bastante comprometida.
Porque si el que me supera en tantas cosas es un idiota, entonces yo soy.......
Con respecto a la anécdota que cuentas, he leído algo sobre ese fenómeno, en Microsiervos, creo, con las absurdos manuales de instrucciones que sacan. Además, sin ir más lejos, coged el manual de cualquier electrodoméstico que tengáis, y que no hayáis tirado. En la parte final, donde habla de problemas y posibles soluciones, en todos, en absolutamente todos hay uno que dice:
Problema: El aparato x no se enciende
Causa: No está enchufada la toma de corriente.
Solución: Enchufe la toma de corriente del aparato.
Está en todos los que yo he visto.
Aparte de eso, sabéis que en Estados Unidos, y en general en los países anglosajones no hay código Civil, y que me corrijan si me equivoco. Pero todo está basado en la jurisprudencia.
Entonces se ha creado una especie de juego entre los consumidores y los fabricantes de:
yo tengo el accidente más absurdo.
tú me indemnizas por no haberlo previsto.
Todos nos acordamos de noticias de que fulano de tal ha cobrado x millones de dólares al cortarse con una taza que se le rompió en un restaurante, porque el asa estaba mal diseñada, o porque el dueño no previó que el sol le daría en los ojos al cliente, al tomar café.
Entonces cada vez los libros de instrucciones, o los carteles previenen de cosas cada vez más absurdas o tontas.
Y todos sabemos que siempre hay alguien dispuesto a usar cualquier cosa de la forma más dañina para sí mismo y para los que le rodean, no importa lo que lo intentes evitar.
Pero eso, tristemente, no es patrimonio exclusivo de los americanos.
Ojalá lo fuera.
Saludos.Jerm
Además, no me gusta tomar como tontos a los americanos, más que nada porque si ellos son la primera potencia económica y en avances tecnológicos, y digo que son tontos, a los que andamos bastante detrás, nos deja en una situación bastante comprometida.
Porque si el que me supera en tantas cosas es un idiota, entonces yo soy.......
Con respecto a la anécdota que cuentas, he leído algo sobre ese fenómeno, en Microsiervos, creo, con las absurdos manuales de instrucciones que sacan. Además, sin ir más lejos, coged el manual de cualquier electrodoméstico que tengáis, y que no hayáis tirado. En la parte final, donde habla de problemas y posibles soluciones, en todos, en absolutamente todos hay uno que dice:
Problema: El aparato x no se enciende
Causa: No está enchufada la toma de corriente.
Solución: Enchufe la toma de corriente del aparato.
Está en todos los que yo he visto.
Aparte de eso, sabéis que en Estados Unidos, y en general en los países anglosajones no hay código Civil, y que me corrijan si me equivoco. Pero todo está basado en la jurisprudencia.
Entonces se ha creado una especie de juego entre los consumidores y los fabricantes de:
yo tengo el accidente más absurdo.
tú me indemnizas por no haberlo previsto.
Todos nos acordamos de noticias de que fulano de tal ha cobrado x millones de dólares al cortarse con una taza que se le rompió en un restaurante, porque el asa estaba mal diseñada, o porque el dueño no previó que el sol le daría en los ojos al cliente, al tomar café.
Entonces cada vez los libros de instrucciones, o los carteles previenen de cosas cada vez más absurdas o tontas.
Y todos sabemos que siempre hay alguien dispuesto a usar cualquier cosa de la forma más dañina para sí mismo y para los que le rodean, no importa lo que lo intentes evitar.
Pero eso, tristemente, no es patrimonio exclusivo de los americanos.
Ojalá lo fuera.
Saludos.Jerm
Amigo Jerm, creo que me incluye injustamente en el cajón de sastre del antiamericanismo. No estoy diciendo yo que la élite no esté a la vanguardia, pero esto es una consecuencia económica, sucedería lo mismo en cualquier otro sitio. El fenómeno que yo trato de mostrar es cultural, no vea temas políticos donde no los hay.
El que su sistema legal de lugar a estas tonterías no es más que un reflejo, y creo que ya debatimos en su día sobre la conveniencia del jurado popular (otro síntoma más).
Estoy seguro de que ha visto muchos casos en los que podrá inducir una esencia americana de la estupidez, o de la osadía ignorante.
Para muestra, un último botón, el sábado pasado se desayunaba el Guardian con la propuesta americana para frenar el calentamiento global y el cambio climático. Situar en el espacio gigantescos espejos (u otra tecnología reflectiva) para compensar el aumento de temperatura con la disminución de luz solar. Tonto doblemente por la quimera en sí y por el efecto, "me tomo anfetas para mantenerme despierto y me pego un chute cuando quiero dormir porque si no no hay quien me pare..."
Publicar un comentario
El que su sistema legal de lugar a estas tonterías no es más que un reflejo, y creo que ya debatimos en su día sobre la conveniencia del jurado popular (otro síntoma más).
Estoy seguro de que ha visto muchos casos en los que podrá inducir una esencia americana de la estupidez, o de la osadía ignorante.
Para muestra, un último botón, el sábado pasado se desayunaba el Guardian con la propuesta americana para frenar el calentamiento global y el cambio climático. Situar en el espacio gigantescos espejos (u otra tecnología reflectiva) para compensar el aumento de temperatura con la disminución de luz solar. Tonto doblemente por la quimera en sí y por el efecto, "me tomo anfetas para mantenerme despierto y me pego un chute cuando quiero dormir porque si no no hay quien me pare..."
<< P´a;agina principal